Impacto de la Ley Uber La Ley 21.553 que entró en vigencia desde enero de 2024 puede cambiar el transporte de pasajeros de varias maneras. Mayor seguridad para los usuarios: Los precios podrían cambiar debido a la regulación y una competencia más justa.

El largo debate en el Congreso

En 2012, la aplicación española Cabify se convirtió en la primera en llegar a Chile, seguida dos años después por Uber, una empresa estadounidense. Estas nuevas plataformas de transporte revolucionaron el panorama del traslado de pasajeros en el país, que hasta entonces estaba dominado por los buses y los taxis licitados (conocidos como “techo amarillo” debido a su característica pintura negra y amarilla). Sin embargo, esta llegada no estuvo exenta de controversia.

Entre 2015 y 2017, los taxistas chilenos llevaron a cabo numerosas protestas callejeras para denunciar la competencia desleal que consideraban representaba este nuevo modelo de negocio no regulado. Estos enfrentamientos dieron lugar a episodios violentos y carreras ilegales por captar pasajeros en las principales ciudades del país.

Ante esta situación conflictiva, surgió la necesidad de establecer una legislación específica para regularizar las operaciones de estas aplicaciones móviles. El objetivo era garantizar condiciones equitativas tanto para los conductores tradicionales como para aquellos asociados con empresas tecnológicas como Uber o Cabify.

Es importante destacar que cada país tiene sus propias leyes respecto al funcionamiento de estas aplicaciones y Chile no es una excepción. Por lo tanto, es fundamental estar informado sobre cuándo entra en vigencia la ley específica sobre Uber u otras plataformas similares dentro del territorio nacional.

En julio de 2018, durante el segundo mandato del expresidente Sebastián Piñera, se presentó un proyecto de ley con el objetivo de establecer regulaciones para las aplicaciones de transporte, asegurando la seguridad vial y la formalidad de los conductores, así como la transparencia en sus operaciones. Después de casi cinco años de debate, en enero del 2023 este proyecto fue aprobado por el Senado. A partir de ese momento se dio un plazo de un año para elaborar un reglamento que detallara los cambios necesarios que debía cumplir la industria.

La entrada en vigencia

A partir de la implementación de la Ley Uber, los conductores que trabajen en aplicaciones de transporte deberán cumplir con nuevos requisitos. Uno de ellos es contar con una licencia profesional clase A, lo cual implica tener una calificación específica como conductor. Los automovilistas tendrán un plazo de 12 meses desde la entrada en vigencia de la ley para renovar su carnet y obtener esta licencia. Mientras tanto, podrán seguir utilizando su licencia estándar no profesional clase B.

Además, se establece que los conductores deberán inscribirse en un registro especial y entregar sus antecedentes penales. Estas medidas buscan garantizar mayor seguridad y calidad en el servicio ofrecido por las aplicaciones de transporte.

Es importante destacar que estos cambios están enfocados únicamente a los conductores que trabajan mediante estas plataformas digitales y no afectan a otros tipos de transportistas o servicios similares. La implementación progresiva de esta nueva regulación busca asegurar un mejor control sobre este tipo particular de actividad económica y proteger tanto a usuarios como a choferes involucrados en ella.

Los autos que serán retirados

Las aplicaciones de transporte como Uber y Cabify deberán cumplir con nuevas regulaciones en cuanto a los vehículos que utilizan para brindar sus servicios. Según la nueva ley, estos coches deben tener ciertas especificaciones técnicas, como la renovación de la revisión técnica, alzavidrios eléctricos, aire acondicionado o climatizador, y cierre automático o centralizado en todas las puertas. Además, se establece que los vehículos deben tener una cilindrada igual o equivalente a 1.4 litros y no pueden superar los 10 años de antigüedad. Esto implica que los coches pequeños conocidos como citycar ya no podrán ser utilizados para este tipo de servicio.

El ajuste en los precios

La entrada en vigencia de la ley Uber ha generado diferentes opiniones entre las empresas y el Gobierno del presidente Gabriel Boric, quienes no están de acuerdo con el posible impacto que esta norma podría tener en los precios y tiempos de espera para los pasajeros. Según Verónica Jadue, gerenta de comunicaciones de Uber en Chile, “creemos que los viajes podrían llegar a costar más del doble y habría que esperar el doble o incluso más tiempo para poder iniciar un viaje”. Por otro lado, el ministro de Transportes, Juan Carlos Muñoz, ha afirmado que estos cambios no afectarán a los consumidores. En una entrevista con Canal 13, expresó: “Entendemos que hay preocupación por este reglamento pero nos interesa asegurar su correcto funcionamiento”.

Impacto en el empleo

La entrada en vigencia de la nueva ley sobre las aplicaciones de transporte podría tener un impacto significativo en el empleo. Según un estudio realizado por el Observatorio del Contexto Económico de la Universidad Diego Portales (OCEC-UDP), casi el 90% de las personas que actualmente trabajan como conductores para estas plataformas podrían verse obligadas a dejar su labor. Esto afectaría a alrededor de 35,992 personas, incluyendo tanto chilenos como extranjeros. Además, se estima que la tasa general de desempleo aumentaría en un 0,4%.

La falta de estabilidad en este tipo de empleos ha sido objeto de discusión, ya que los socios de plataformas como Uber o servicios de reparto suelen trabajar hasta 48 horas a la semana. Según Arturo Arriagada, sociólogo y académico de la Universidad Adolfo Ibáñez (UAI), esta supuesta ventaja de tener control sobre el propio tiempo y ser el propio jefe conlleva también situaciones precarias, turnos agotadores, exposición a riesgos y escasas garantías por parte de las aplicaciones.

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Inicio de vigencia de la ley Uber

La Ley Uber, que comenzará a regir a partir de principios del año 2024, tendrá un impacto directo tanto en los conductores como en los usuarios de este servicio. Será obligatorio para ambas partes adaptarse a las nuevas regulaciones establecidas por esta normativa.

Entre los cambios más destacados se encuentra la necesidad de obtener una licencia especial para operar como conductor de Uber. Además, se exigirá contar con un seguro específico que cubra cualquier eventualidad durante el traslado de pasajeros.

Por otro lado, esta ley también establecerá tarifas mínimas y máximas para cada trayecto realizado mediante la plataforma Uber. Esto busca garantizar una competencia justa entre todos los actores del sector y evitar abusos hacia los usuarios.

Fecha de entrada en vigencia de la ley 21553

Según lo establecido en el artículo primero transitorio de la ley Nº21.553, el Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones tiene la responsabilidad de emitir el reglamento correspondiente dentro de un plazo máximo de nueve meses a partir de la fecha en que se publicó dicha ley. En este sentido, dicho plazo vence específicamente el 19 de enero del año 2024.

La entrada en vigencia efectiva de esta ley está sujeta al cumplimiento del mencionado plazo para la emisión del reglamento por parte del Ministerio. Una vez que se cumpla este requisito, las disposiciones y regulaciones contempladas en la ley podrán ser aplicadas y puestas en práctica.

El objetivo principal detrás de esta legislación es regularizar y establecer normas claras para los servicios prestados por plataformas como Uber dentro del ámbito chileno. Esto implica tanto aspectos relacionados con los conductores como con los usuarios, buscando garantizar condiciones adecuadas tanto para quienes ofrecen estos servicios como para quienes los utilizan.

Es importante destacar que hasta que entre oficialmente en vigor esta nueva legislación, las operaciones realizadas por empresas como Uber seguirán sujetas a las regulaciones existentes previas a su promulgación. Por lo tanto, una vez que se cumpla el plazo estipulado y se publique el reglamento correspondiente, será necesario estar atentos a cualquier cambio o ajuste necesario para adaptarse a las nuevas disposiciones legales establecidas por esta ley específica sobre transporte remunerado mediante aplicaciones móviles.

Autos aptos para Uber en 2024

La Ley Uber, que regula el funcionamiento de las aplicaciones de transporte como Uber, establece ciertos requisitos para los vehículos que pueden operar en estas plataformas. Una de las condiciones es que los automóviles no pueden tener una antigüedad mayor a 7 años. Esto significa que, si nos encontramos en enero de 2024, aquellos vehículos fabricados antes del año 2017 no podrán ser utilizados para brindar servicios a través de estas aplicaciones.

Además, la ley también contempla restricciones específicas para los vehículos con cero o bajas emisiones. En este caso, la antigüedad máxima permitida será de cuatro años. Esto implica que solo se podrán utilizar automóviles eléctricos o híbridos recientes para prestar servicios a través de plataformas como Uber.

Estas medidas tienen como objetivo garantizar la seguridad y calidad del servicio ofrecido por las aplicaciones de transporte. Al limitar la antigüedad de los vehículos utilizados, se busca asegurar que estos cumplan con estándares mínimos en cuanto a su estado mecánico y tecnológico.

Es importante destacar que estas regulaciones entrarán en vigencia una vez promulgada y publicada oficialmente la Ley Uber. Por lo tanto, es fundamental estar informado sobre cuándo exactamente comenzará a regir esta normativa para poder adaptarse adecuadamente a sus disposiciones y evitar posibles sanciones por incumplimiento.

Licencia requerida por la legislación para Uber

Para poder trabajar como conductor de Uber en Chile, se requiere tener una licencia clase B con al menos 2 años de antigüedad. Esto significa que debes haber tenido tu licencia por un período mínimo de dos años antes de poder registrarte como conductor en la plataforma.

Además, es necesario presentar un certificado médico que garantice tu aptitud física y mental para conducir. Este certificado debe ser emitido por un profesional autorizado y actualizado.

Katy